Filipinas centra sus inversiones en un ferrocarril moderno

El Gobierno ha puesto en marcha un plan de infraestructuras de 2017 a 2022 (Philliphine Development Plan 2017-2022) con el que se quiere aumentar gradualmente la inversión hasta alcanzar el objetivo del 7% del PIB anual para 2022. el ferrocarril es uno de los principales protagonistas.

La República de Filipinas, con 300.000 km2 de superficie, es un archipiélago de 7.100 islas situado en el sudeste de Asia, al este de Vietnam, al sur de Taiwán. Está rodeado por el mar de Filipinas al este, el mar de Célebes al sur y el mar de China meridional al oeste. Tiene una población de 102 millones de habitantes, la mayor de la región tras Indonesia. Su constante avance durante los últimos años apunta a que estará entra las 16 mayores economías mundiales en el 2050. Las previsiones del FMI indican que la economía filipina mantendrá su crecimiento en tasas alrededor del 7% hasta el año 2022. Para conseguirlo, el Gobierno ha puesto en marcha el plan de infraestructuras 2017-2022 (Philliphine Development Plan 2017-2022) con el que se quiere aumentar gradualmente la inversión hasta alcanzar el objetivo del 7% del PIB anual para 2022, lo que equivaldría a 170.000 millones de euros en cinco años. En el año 2018 se ha aprobado una partida de 1.169,5 billones de pesos filipinos (19.700 millones de euros).

Este ambicioso programa se ha llamado “Build Build Build plan”. Además, el Ejecutivo ha decidido dar continuidad a los proyectos de participación público-privada (PPP) del Gobierno anterior en materia de transporte (metro y tren ligero, así como aeropuertos).

Con esta nueva proyección a medio plazo se busca dar un impulso his- tórico al transporte con el objetivo de conseguir unas redes modernas, que den respuesta a las crecientes necesidades de la población. Unos objetivos en los que se tienen muy en cuenta la orografía del país que, en muchas ocasiones, dificulta la puesta en marcha de nuevos traza- dos. El capítulo 19 de este progra- ma, titulado “Acelerando el desarrollo de las infraestructuras”, deja patente el destacado papel del ferrocarril. La red actual, tal como se indica en esta sección, se ampliará mediante el desarrollo de nuevas líneas en las principales regiones insulares. De acuerdo con el objetivo de incrementar este medio de transporte frente al tráfico rodado, en los nuevos proyectos se le dará prioridad en el derecho de paso, tanto en líneas de pasajeros como de mercancías. Asimismo, para evi- tar futuros problemas de conectividad e interoperabilidad, se implementará el uso de ancho estándar (1.435 mm) para trabajos en fase de tramitación. A grandes rasgos, en este proceso de rehabilitación se busca la recuperación del ferrocarril para conectar la zona norte y el sur de la isla de Luzón; la ampliación de la red de metro en Manila que pre- vé, nuevas líneas; y el aumento de la red de aeropuertos para transporte regional, así como el sistema ferroviario de 2.000 kilómetros en la isla de Mindanao.

Estructura

La red ferroviaria se encuentra en su totalidad en la isla de Luzón, que tiene un área de 104.688 km2, lo que la convierte en la decimosépti- ma mayor isla del mundo. En ella se encuentran tanto la capital del país, Manila, como la ciudad más poblada del país, Quezón.

Este trazado se divide en tres áreas: Zona metropolitana de Manila (26 kilómetros), tramo Manila-Legazpi (480 kilómetros) y Northrail, en la zona norte que actualmente está sin servicio. Hay dos tramos más en las islas de Panay y Negros, que no están operativos. El sector está compuesto por la compañía pública de ferrocarriles, Philippine National Railways (PNR), que es el dueña de la red y que también está a cargo de la operación comercial; el Sistema de Tránsito de Metro Ligero o Metro Rail Transit (MRT 3) y la Autoridad de Tren ligero o Light Rail Transit Authority (LRTA). Todos ellos depen- dientes del Ministerio de Transporte y Comunicaciones (DOTC). Asimismo, también está Northrail, la agencia adjunta del Departamento de Transporte que está a cargo de la construcción, operación y administración de los sistemas ferroviarios que prestan servicios a Metro Manila, Luzón Central y el norte de Luzón.

Inversiones al alza

De todos los planes previstos, los más destacados son los que han aprobado recientemente el Comi- té de Coordinación de Inversiones (ICC) de la Junta de la Autoridad Nacional de Economía y Desarro- llo (NEDA) de Filipinas. Son tres proyectos ferroviarios que suman 9.110 millones de euros. Se trata de la red de Mindanao, (varias co- nexiones de cercanías, estaciones de intercambio con otros medios de transporte), rehabilitación y ex- pansión del metro ligero de Manila, así como la primera red de metro subterránea del país.

PROYECTO FERROVIARIO NORTE-SUR (NSRP)

Esta conexión, conocida como (NSRP) quiere reactivar el ferrocarril en la isla de Luzón. El objetivo es proporcionar mejores servicios de transporte y logística entre dos regiones urbanas de rápido crecimiento. El proyecto tiene un coste estimado de 285.000 millones de pesos filipinos (4.801 millones de euros) y se financiará a través de la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD). Con su puesta en marcha se conectará la zona de Metro Manila y la ciudad de Legazpi, capital de la provincia de Albay. El diseño incluye una red de larga distancia de 581 kilómetros y una línea de cercanías de 56 kilómetros que irá desde Manila hacia el sur hasta Calamba, en la provincia de La Laguna. Su implementación se llevará a cabo conjuntamente por el Departamento de Transporte y Comunicaciones de Filipinas (DOTC) y los ferrocarriles del país (PNR). Una vez en operación comercial se estima que habrá diez viajes diarios, con siete trenes, que pararán en 66 estaciones. Se calcula, además, que el primer año transportará a 316.000 pasajeros por día.

LÍNEA FERROVIARIA MINDANAO

Después de dos décadas de estudios de viabilidad, el conocido proyecto “Minda- nao Railway Network” verá la luz en 2018. Se trata de una red que tendrá 2.000 kiló- metros. La línea conectará centros urbanos clave del sur del archipiélago, entre los que destacan Davao, Zamboanga, Butuán, Surigao, Cagayande Oro, Iligan y General Santos. Además, habrá un nuevo puente que unirá las islas centrales de Panay, Guimarás y Negros. Asimismo, se extenderá a los principales puertos y otras puertas de entrada. La idea es dotar a Mindanao de unas vías férreas modernas y material rodante de última generación. En la primera fase se llevará a cabo la construcción de la sección de cercanías, de 108 kilómetros, que enlazará las ciudades de Taúm (Davao del Norte) y Digos (Davao del Sur). El coste estimado del proyecto es de 31.5044 millones de pesos filipinos (531 millones de euros) y se financiará con fondos locales. El subsecretario de Transportes del país, Ce- sar Chavez, ha anunciado que el Departamento de Transporte (DOT) ya ha destinado 6.500 millones de pesos filipinos (109,5 millones de euros) para la adquisición de terrenos y el trabajo de ingeniería preliminar de la etapa inicial. En la segunda fase se llevará a cabo el tramo hasta la ciudad de Butuán, mientras que en la tercera, la red se extenderá hasta la de Cagayán de Oro. Por último, habrá una conexión entre este centro urbano con Iligan y la península de Zamboanga.

CONEXIÓN MALOLOS-CLARK

El proyecto Malolos-Clark (MCRP) se llevará a cabo en dos fases. La primera de ellas desde Malolos, en la provincia de Bulacan, hasta el aeropuerto internacional Clark, al noroeste de Manila. En la segunda etapa se ampliará la ruta hasta la Ciudad Verde de Clark. El proyecto tiene un costo estimado de 211,43 billones de pesos filipinos (3.500 millones de euros). La construcción se financiará a través de asistencia oficial para el desarrollo de Japón (AOD), mientras que las operaciones y el mantenimiento se realizarán a través de la Asociación Público- Privada (APP). Esta conexión se conectará con la parte en curso Tutuban-Malolos del Ferrocarril Commuter Norte Sur.

La Fase I comenzará en el segundo trimestre de 2019 y se espera que esté finalizada en el año 2022. La etapa II se implementará entre 2022 y 2024. Con esta nueva red se reducirá el tiempo de viaje de Manila al aeropuerto internacional Clark de dos horas a 55 minutos. El Departamento de Transporte de Filipinas ya tiene definidas las cinco primeras estaciones, que se construirán a lo largo de un recorrido de 106 kilómetros. Estas paradas estarán en Marilao y Meycauayan en Bulacán, Valenzuela, Caloocan y Tutuban, en Metro Manila. Las otras 12 serán: Solís, Bocaue, Balagtas, Guiguinto, Malolos, Calumpit, Apalit, San Fernando, Ángeles, Clark, el Aeropuerto Internacional Clark y la propuesta Nueva Ciudad Clark en Pampanga. La red conectará con la parte actual Tutuban- Malolos del proyecto ferroviario norte-sur.