EL PROYECTO, DESARROLLADO POR EL DEPARTAMENTO DE I+D+I DE SEGULA TECNOLOGÍAS SE RETOMÓ A MEDIADOS DE 2021 COMO UN PROYECTO ESTRATÉGICO PARA LA COMPAÑÍA, ESTANDO A DÍA DE HOY EN SUS ÚLTIMAS FASES DE DISEÑO.
Ya hace varios años que se habla de la necesidad de que los trenes del futuro deben ser “modulares” y “flexibles” en muchos ámbitos (sistemas, equipamiento, interiorismo, …), de manera que la configuración de los mismos se pueda adaptar durante su vida útil sin tener que hacer grandes cambios ya que, en sus 40 años de vida, un tren se puede quedar obsoleto si no es capaz de adaptarse a las necesidades del día a día, y más teniendo en cuenta la rápida evolución de la tecnología y la sociedad.
A nivel de configuración de layout, este concepto de adaptabilidad se ha parecido más a una quimera que a una posibilidad real dada su complejidad de aplicación. Sin embargo, el proyecto EREMIT supone una disrupción al respecto: permite modificar la configuración de layout de pasajeros acorde a la demanda y/o a las necesidades de los usuarios. Gracias a este sistema, en unas pocas horas, se puede cambiar la distancia entre los asientos, pasar de una configuración de 2+2 a 2+1, incluir mesas entre cualquier fila de asientos, o incluso añadir módulos para distintos usos (soportes para bicis, áreas PMR, maleteros o módulos de transporte…).
El proyecto, desarrollado por el departamento de I+D+I de SEGULA TECNOLOGÍAS (desde su Centro de Excelencia Internacional del ferrocarril ubicado en Zaragoza), tuvo una primera fase entre 2018 y 2019 en la que se comprobó el alto potencial del mismo, pero, a su vez, la alta complejidad técnica de desarrollo debido a las exigentes normativas aplicables al sector. A pesar de ello, y dado el potencial de aplicación ante los nuevos retos de movilidad que plateó la pandemia, el proyecto EREMIT se retomó a mediados de 2021 como un proyecto estratégico para la compañía, estando a día de hoy en sus últimas fases de diseño.
