El proyecto se encuentra aún en fase de estudio. Se pretende conectar Kuala Lumpur con Singapur a través de un tren de Alta Velocidad, cuyo trayecto duraría alrededor de 90 minutos. El trazado inicial sería de unos 330 kilómetros con 4 o 5 paradas: en Malasia, la estación estaría en Bandar Malaysia y en Singapur finalizaría en Jurong East.
A día de hoy, el principal reto para el desarrollo del proyecto es cómo repartir su coste: el 95% del trazado pasa por Malasia, que quiere que el presupuesto se reparta de forma más equitativa.
El objetivo inicial era que el proyecto estuviese finalizado en 2020, pero con toda seguridad este plazo se alargará.
A pesar de que inicialmente se estimó un presupuesto de unos 10.000 millones de euros, hay algunos condicionantes que podrían incluso duplicar este importe: dependerá de los inconvenientes a los que se enfrenten los ingenieros para la construcción del trazado, posibles restricciones del crédito privado, retrasos en la obtención de los terrenos, escasez de mano de obra y de materiales, consenso en la regulación de aduanas y control de pasaportes, deterioro de las relaciones entre Singapur y Malasia y desacuerdos en la política fiscal.
Está acordado por ambos países a nivel de presidentes la construcción de este proyecto y así se anunció conjuntamente entre ambos países en febrero de 2013. Además, se han acordado algunos aspectos (control sanitario conjunto, aspectos de aduanas, frecuencia de bandas a reservar, localización de depósitos) pero faltan aún otros como estudio de curso de vía, diseño de línea y otras especificaciones técnicas. Una vez decididos estos puntos, el siguiente paso es su aprobación para después tratar los aspectos de financiación, que podrían resolverse en el segundo semestre de 2016.