La unión por ferrocarril entre estados unidos y canadá verá en los próximos años procesos de mejora tanto en las costas como de oeste a este. se busca potenciar las rutas turísticas de pasajeros y el transporte de mercancías.
Con casi 9.000 kilómetros de longitud, la frontera que comparten los Estados Unidos y Canadá es la más grande del mundo. Los enlaces ferroviarios tienen el mismo ancho de vía 1,435 mm (4 pies 81⁄2). Las conexiones del norte de Canadá al sur, hasta unirse con las rutas de su país vecino, se han ido incrementando tras la firma Tratado de Libre Comercio Canadá-EE.UU. y posteriormente con el Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (NAFTA).
Con el auge en los años 70 del trafico interurbano de mercancías por carretera, las compañías de ferrocarril que operan en ambos países tuvieron que evolucionar hacia el transporte intermodal de larga distancia, especialmente de materias primas a granel y en grandes cantidades. De ahí que haya obtenido un papel tan destaca do en materia de movilidad. Entre las más importantes, la que parte del noreste de Canadá, desde Prince Rupert y atraviesa el eje central pasando por Winnipeg hasta llegar a la costa del Golfo. Se une a ellas las conexiones internacionales de pasajeros de ambas costas como los conocidos corredores del Pacífico (The Pacific Northwest Corridor) y también el del Atlántico.
APGCI: ASIAN PACIFIC
El APGCI consiste en una serie de proyectos de infraestructura de transporte que incluye mejoras en las principales conexiones ferroviarias y de carreteras desde el Oeste de Canadá hacia el sur de los Estados Unidos, los cruces fronterizos principales y los mayores puertos de Canadá. Es una iniciativa donde la colaboración público privada está siendo clave.
Hasta la fecha el Gobierno federal de Canadá ha invertido 1.400 millones de dólares canadienses (991 M€) en esta iniciativa. Se trata de un consorcio de administraciones de transporte de provincias, municipios y el sector privado que busca impulsar el comercio internacional mediante un sistema multimodal eficiente, con terminales conjuntas y optimización de recursos. El total de la inversión es de 3.500 millones de dólares canadienses (2.477 M€)
CORREDOR PACIFIC NORTWEST RAIL
El Corredor Ferroviario del Noroeste del Pacífico (PNWRC) es uno de los once proyectos de velocidad alta que quiere impulsar el Gobierno federal de Estados Unidos. Se trata de una línea de 466 millas (750 kilómetros) que circula desde Eugene, en Estados Unidos a Vancouver, en Canadá.
Dentro de esta línea se encuentra el famoso servicio “Amtrak Cascades”. Es considerado uno de los proyectos de revitalización del transporte ferroviario de larga distancia de más éxito en Norteamérica. Desde hace 20 años, la compañía ha sido capaz de aprovechar al máximo este trayecto, considerado uno de los más excepcionales del mundo por sus paisajes, gracias a la apuesta por la tecnología española.
Trenes Talgo
En una infraestructura que casi no ha sido renovada desde sus inicios, en las últimas décadas del siglo XIX, se ha optado por incorporar trenes pendulares para un recorrido montañoso y pronunciado donde es necesario un material rodante moderno, cómodo, eficaz y de máximas garantías. La opción elegida ha sido la tecnología de Talgo. En los años 90, Amtrack adquirió cinco composiciones de trenes de la serie 6, que están preparados para alcanzar los 200 km/h. En 2009, un nuevo pedido añade a esta ruta material rodante de la serie 8.
En estos momentos se trabaja en la mejora de la ruta. Para ello, el depar- tamento de Transporte de Estados Unidos colabora con BNSF Railway y Sound Transit. En el bienio 2015- 2017, se tienen previsto diez proyectos. Entre los más destacado, una tercera vía hasta la ciudad de Kelso, la adquisición de nuevas locomotoras, trabajos de superestructura para la instalación de nueva raíles cerca de la estación de Seattle, el bypass en Point Defiance y una ruta interna entre Tacoma y Nisquall. En 2023, los trabajos de mejora harán que los trenes puedan circular a una veclidad máximas de 110 millas por hora (180 km/h). Así el trayecto entre portland y Seattle se recorrerá en 2 horas y media. El de Seattle a Vancouver llevará dos horas y 37 minutos.
ESTUDIO DE CONEXIÓN FERROVIARIA ENTRE ALASKA Y CANADÁ
La unión por ferrocarril entre Alaska y Canadá lleva analizándose años. Debido a que se trata de un recorrido muy próximo a zonas naturales protegidas, los estudios de viabilidad se centran en el trazado más recomendado.
En 2016, el Van Horne Institute (Alberta) ha propuesto una al- ternativa que partiría de Fort McMurraya Delta Junction, en Alaska. Una ruta especialmente pensada para el transporte de derivados del petróleo.