Debido a los objetivos de Europa de reducir emisiones y conseguir la neutralidad climática, el sector del ferrocarril (el medio de transporte más sostenible) sigue imparable en su crecimiento. Esto ha ocasionado un altísimo número de pedidos para realizar nuevo material rodante. Sin embargo, en los últimos años se está empezando a ver una tendencia diferente: reformar y transformar unidades existentes para hacerlas más sostenibles o para alargar la vida útil de los vehículos.
En esta línea, desde hace unos años, SEGULA Tecnologías, desde su Centro de Excelencia Ferroviario de Zaragoza, trabaja en proyectos de remodelación integral de diversa índole, desarrollando toda la ingeniería necesaria para la transformación de series completas de vehículos con el objetivo principal de alargar su vida útil. En estos casos, el concepto de los proyectos radica en desmantelar completamente el vehículo (hasta dejar prácticamente la estructura metálica), y se vuelve a equipar con nuevos sistemas, elementos y materiales, diseñados acorde a requisitos actuales más sostenibles.
José Ángel Martín, Director Ejecutivo de la División Ferroviaria de SEGULA España, remarca que “estamos ante una tipología de proyectos que están en auge. Por supuesto, una de las principales motivaciones para que se opte por un proyecto de remodelación en lugar de un diseño completamente nuevo es la económica, ya que -en general- te permite ahorrar la fabricación de las cajas estructurales de los vehículos. Sin embargo, cabe remarcar la importancia de este hecho en niveles de sostenibilidad puesto que, en lugar de RECICLAR el aluminio o el acero (con el coste energético que ello conlleva), se REUTILIZA el material antiguo otorgándole una segunda vida útil, lo cual es una de las premisas del ecodiseño y, además, está muy alineado con los criterios de economía circular que vemos en la sociedad actual.”
De este tipo de proyectos de remodelación ferroviaria, actualmente SEGULA participa en proyectos de tipologías de vehículos de metro, cercanías, e incluso locomotoras. Y, en palabras de José Ángel Martín, “la experiencia adquirida con estos proyectos ha supuesto un incremento en capacitaciones técnicas dado que, frente a lo que se tiende a pensar, este tipo de proyectos es más complejo a nivel de ingeniería que el desarrollo de un vehículo nuevo por la necesidad de tener que analizar y compatibilizar requisitos y diseños de hace varios años con los actuales, incluyendo las exigentes normativas vigentes”.